lunes, 15 de julio de 2024

Modelo de moda mexicano influenciado por la cultura universal de corte holandés.

Un modelo inspirado en figuras de la historia universal como “Erasmo de Rotterdam” y las justas impresiones que se tienen de las flotas marinas civiles de los países del norte de Europa durante la época contemporánea, puede estar a la par coordinado con la fenomenología histórica y social de la cultura nutricional del crecimiento y desarrollo humano (Que puede ser descrita por medio del común estilo circunstancial de cuestiones como las de: Tener hambre y/o tener poco dinero o mucho dinero. Dando lugar de ese modo, a reconocer las facultades predominantes sobre la estabilidad emocional y fisiológica saludable entre personas que rondan los distintos pesos aproximados en báscula de: 40 kg, 50 kg, 60 kg, 70 kg, 80 kg, 90 kg, 100 kg y más.) en la etapa de la pubertad en la región del noroeste de México, que puede ser tocante al tema ejemplar de consumir con regularidad si ese fuera el caso durante esa etapa de la vida humana, frutos como los mangos cosechados en casa, teniendo por referencia de paso el estilo del convencional porte de personalidades varoniles y femeninas dentro del marco de la integridad de identidades educadas en la cultura proletaria de los pares iguales de los derechos civiles del hombre y la mujer con valores dramáticos de una vida social común a una antropología nacional de México que reconoce como única a la reproducción de cuadros de población que figuran la presencia de las tradicionalmente conocidas “chinas poblanas”, siendo conocidos cuáles son sus respectivos rasgos fenotípicos más característicos, mismos que son compartidos incluso con otro grupos etnográficos hermanos dentro del mismo país, de tal modo, que el entender que se puede llegar a tener del teatro que corresponde al drama que en los términos de la cultura de los semáforos, da luz verde a la vida pública para que ésta transite libremente por la rúa donde se encuentra estacionada por un corto lapso de tiempo, siendo éste un caso que puede ser alegórico a la calidad de aquellas obras teatrales que en el semáforo en rojo tienen lugar sin grandes contratiempos, tal como sucede con las de protagonistas de origen “moro” en un sentido netamente español colonialista de América Latina y el Caribe, que rememora a la figura de los “morros” que dentro del marco cultural de la influencia que tienen los valores civiles y sociales que son comunes en países como Francia, Inglaterra, España y Norteamérica, dan lugar a que sea factible dar por razonable la circunscripción que existe entre múltiples cuadros de población mexicana distribuidos alrededor del mundo, de la identidad de su pueblo nacional en festividades como la de la celebración de la Batalla de Puebla el “5 mayo”, hecho que tiende a ser dinámico en relación a distintos dramas temáticos que por concepto se definen por su naturaleza social única e indiscutible, tal como puede ser por ejemplo, el de la cultura gay marinera en los países desarrollados conocida a través de la correcta interpretación que se hace del Estado de Bienestar con placeres exclusivos de distintos grupos familiares de tipo oriental según la teoría social marxista, es decir de orígenes pastoriles y campesinos donde paulatinamente se da lugar a la existencia de los valores comunes a las organizaciones populares de peloteros, futbolistas y otras clases de grupos sociales comprometidos con los servicios de esparcimiento que son funcionales a la validación marginal de la pasión por los estilos de vida “social weird & funky Buddha” del “outsourcing” del “frame & housing” de la “raza paisa y húngara de barrio urbano citadino de centro y periferia” con juegos defensivos de soporte de las voluntades con mejor posicionamiento dentro de dicha Economía del Bienestar con la pasión deportiva que mejor se identifica con la remembranza de algunos de los cómicos famosos de México de las décadas de los 80s y 90s, tal como puede ser Alberto Rojas “El Caballo”, misma que junto con las regulares impresiones que causan figuras de acción y /o de caricaturas como las de los muñequitos de los “Homies” con personajes como el que empuja un carrito paletas con gorra de los “Dodgers” dentro de ambientes de aficionados a equipos como los “Lakers” de Los Ángeles, California, EUA, se antoja afín a paralelismos que se pueden hacer siendo vendedor de helados y paletas de la marca “Nestlé” dentro de tiendas de mini supermercados con impresiones valedoras de los comerciales de la televisión de paletas como las de la marca “Mega”, caso que da cabida también de paso a la existencia de valores de culto a la creatividad propia de proyectos labores como el maquilador o como el del concepto de la cultura del consumo de masas expresa en las salas de billar y/o de casinos. Del mismo modo, el reconocimiento dentro de la industria de la época de oro del cine mexicano de cómicos de la talla de Mario Moreno “Cantinflas”, da lugar a valorar las justas impresiones populares que existen sobre las culturas tradicionales de la historia universal, tales como pueden ser la de los “mogoles”, los “vaqueros”, los “tropi-congales”, etcétera, mismas donde el caso por ejemplo, “de no saber chillar” como quien dice "a la buena de dios" ante diversas clases de retos que impone la adversidad, redunda en la obligación de tener que velar por las consecuencias que supone enfrentar las crisis de los placeres de las modas juveniles del “Rock” y del “Rap”, que durante distintas temporadas entre distintas generaciones de niños y jóvenes, han puesto en jaque a la identidad de quien las explota con regularidad, tal como podría suceder si ese fuera el caso, entre algunos consumidores potenciales de productos de marcas como “Dr. Martens” o entre algunos telespectadores de programas de televisión como “South Park”.

Otro asunto convergente del estilo de líneas de marcas y de distintos diseños casuales de moda, puede ser el de las bicicletas de montaña retro lucidoras en ambientes de consumo de las primeras películas de “Star Wars" entre un público alegre con la reproducción de temas musicales que incluyen cuando así es consigna o negocio, a canciones como la de “Cartas marcadas, 1948" interpretada por "Pedro Infante" . Del mismo modo, se puede tener por dominio cultural crítico de los bailes escolares y los bailes familiares de raíces campesinas que ejercieron en épocas pasadas oficios artesanales como el de la fabricación de ladrillos, a los juegos de circo, maroma y teatro callejero hechos con juguetes como las canicas, las loterías, las matatenas, el frontón-mano y el futbeis, al estilo de los paisas que son raza y chavos de la onda del tipo similares al personaje de “Memín Pinguín”, todo ello dentro de un contexto de desarrollo social y humano de alcance global mediático con espíritu comercial que ejerce un dominio sobre dramas televisivos e internautas que se suponen atentos a las actuaciones históricas de personajes con ascendencia alemana, irlandesa e inglesa que narran historias de la isla de Manhattan, NY, con impacto en distintas regiones de los Estados Unidos de Norteamérica como las de California, Texas, Florida, Tennessee, Puerto Rico, Hawai e incluso en el lejano oriente como en Japón. Un ejemplo de caso en ese sentido, pueden ser las historias que se cuentan en programas de televisión como el de “Scooby Doo”.