jueves, 4 de enero de 2024

La moda casual y la influencia de la vida religiosa.

Los conceptos de marketing publicitario exclusivos de algunas localidades en el mundo durante alguna época determinada, tal como sucede con los propios del universo social de la producción, distribución y ventas finales de “donas” o “hot dogs” o “hamburguesas” o “cervezas” o “carne asada” o de “frituras de harina de maíz, de trigo y de papas fritas”, que se coordinan con las líneas de moda de trabajo de limpieza de casas habitación y locales comerciales, además de con los compromisos con el crecimiento de empresas de publicidad tradicional, también pueden coordinarse con las líneas de moda especializadas en los altos estudios de distintas disciplinas deportivas, dentro de un contexto del consumo de tendencias de los estilos de moda hecho a la natural identidad cultural de grupos étnicos de negros, indios, chinos, griegos y españoles moros y blancos, que pueden ser reconocidos en relación a la identidad conceptual de figuras emblemáticas reconocidas de la historia de la cultura popular de masas, tal como sucede con la de “Charles Chaplin”, dentro de un contexto afrancesado de la gente de mundo donde la calidad de la prestación de distintas clases de servicios múltiples entre operadores italianos, holandeses, alemanes y norteamericanos comprometidos con la buena fortuna de las bendiciones cristianas, puede realizarse si así fuera necesario, con un corte del tipo de brasileño a mexicano de frontera con Norteamérica con un perfil "indie internacional" a juicio de la cultura centroamericana de la vida ejemplar de los templos religiosos con una línea de acción comercial trascendental del espíritu angelical de personalidades en edad reproductiva con intereses comunes a las influencias de la gimnasia sexual y el ritualismo de los templos clásicos dedicados al amor, donde el estilo de los colores más populares en las religiones orientales y el mundo contemporáneo de la cultura popular del “rap”, supone las determinantes del tránsito mercantil transoceánico y los estudios artísticos de las formas humanas perfectas y también las obtusas, mismas que son responsables del diseño de distintos modelos de moda con colores oscuros que van del negro al azul marino para salir de trances forzados y también para jugar con la causa de que no es imposible dar cauce a su regular desarrollo de manera casual y afortunada.

La crónica de un determinado modelo de caso ejemplar que sirve a la descripción de una particular trayectoria del gasto corriente que es común de un estilo estilo de vida en concreto, puede ser aquella que da por viables a las oportunidades que tienden a ser aprovechadas en un estricto sentido comprometido con las influencias inspiradas en dramas de biografías históricas que hacen alegoría a la vida de personajes ficcionales como “Jeremías Springfield”, pudiendo éstas mismas ser condicionantes de un reflejo de una identidad hispana que se asemeja a la del “albañil” con pose afín a la del equipo de baseball de “Los Diablos Rojos” de México, caso que sin ser promovido por un rango categórico del prestigio de un tentativo nivel “oro” sino tan sólo de un nivel “plata”, supone que éste termina por ser liderado por el carácter competitivo de la naturaleza de los “tumbadores” de los primeros puestos de popularidad en los rankings de hits musicales de moda, cosa que se entiende como parte de “pedote” propio de la cultura del “rock” que se define como embriagado de “reggae roots” a la moda del “rootbeer” y la línea “rotten” que secunda a las dinámicas sociales empáticas de los motivos religiosos orientales y las influencias de los cómics y de las series televisivas como “Smallville” y “Beavis and Butthead”. La cuestión descrita por concepto entonces, puede dar lugar al reconocimiento de un concepto que raya en lo “panchero” de rancho que asume responsabilidades propias de las fincas que terminan por ser conurbadas con el tiempo, tal como sucede por ejemplo, con las que existen en localidades que son sedes de los equipos de béisbol más ganadores de la “Liga mexicana del Pacífico” de: “Naranjeros”, “Tomateros” y “Venados”, seguido de “Cañeros”. Del mismo modo, dar cabida a que una dimensión clásica mozárabe de la cultura hispana tradicional, tienda a estar mejor colocada en relación a la dimensión de la herencia clásica de la cultura grecorromana, es un caso que puede ser jugado en materia de trabajo y previsión social con estudios de protección civil entre familias de particulares con ancestros conocedores del fenómeno social de las invasiones de predios habitacionales en los cinturones urbanos de localidades urbanas del noroeste de México, caso que supondría reconocer a la calidad de los cabales que pesan sobre la cultura del rol popular predecible que toca jugar a distintos grupos de personas según el corte generacional, así como también según la cabalidad que existe al respecto de la naturaleza propia del reconocimiento de su particular identidad nacional y regional, misma que es conocida por medio de información cómo la del lugar de su nacimiento, hecho de paso que puede dar por comprometida a la rutina de los coordinados regulares con la cultura predominante del "mass media" de temporada, ello como parte del marketing publicitario comercial y social de la época a la que un particular grupo generacional pertenece, tal como sucede con el caso por ejemplo, de aquellos sujetos que se identifican con la fenomenología de los estudiantes de protección civil entre grupos de familiares con ancestros fundadores de barriadas populares que décadas atrás fueron invasiones. Del mismo modo, reconocer la calidad de la identificación con distintas corrientes musicales latinas y regionales, tal como puede ser la que representa el “Grupo Firme”, es un caso que se entiende en relación al sano concepto que existe en torno a cuál es la naturaleza del atesoramiento del oro de Norteamérica a lo cronista histórico que sabe de sacar a colación la cultura popular de los orígenes de la fundación de la ciudad de San Francisco, California, Estados Unidos. Otro asunto relevante en el mismo sentido de lo antes descrito, es el del concepto que mejor define a personalidades hechas a los extremos que distinguen entre la naturaleza derrochadora y la naturaleza impositiva de un mismo dominio existencial del consumismo comercial, caso que puede ser bien comprendido por ejemplo, en relación a la identificación con la cultura de las "clavadas" en el básquetbol con penetración entre consumidores asiduos de distintas presentaciones de los productos comestibles de la marca “Bimbo” y “Marinela” dentro de ambientaciones musicales con hits de los géneros “Pop latino” y “Tropipop” con temas clásicos del recuerdo de la música de “rumba”, “samba”, “mambo” y “cha-cha-chá”, así como también con conciencia de clase que da cabales sobre la integridad de la cultura del internacionalismo global que respalda la actividad pública y privada de diversos particulares con apuestas puestas sobre el destino de las personalidades de familiares, amigos, conocidos y también de estrellas del cine, radio, televisión y prensa, residentes en el extranjero.

Un concepto del estilo de vida femenino que reproduce la esencia que figura los estudios de la forma de personalidades similares a la muñeca “Barbie”, es un caso que además de poder ser consecuente con la natural expresión del sentido común que predomina sobre la caracterización fenotípica de su rostro o incluso de las ventas de ajuste a su trazo escénico cotidiano de forma regular y convencional, puede ser contrastado con la cultura popular de la expresión cotidiana de personalidades femeninas que tienden a ser dinámicas en relación a la correcta figuración popular que se tiene de la identidad de las madres y niñeras de bebés y niños pequeños que compromete en múltiples ocasiones, al límite de las actividades regulares de distintos grupos de mujeres clasificadas por concepto de su diario acontecer en materia de activación física y rutinas cotidianas de aseo y cuidado de su aspecto personal, dando lugar de paso a la correcta determinación de su espíritu hacendoso consecuente en ocasiones con la práctica de alguna disciplina deportiva, el desarrollo de algún proyecto escolar o de trabajo en específico e incluso de atención a alguna clase de malestar o enfermedad temporal o crónica que es padecida por alguien en particular en primera, segunda o tercera persona. Del mismo modo, se puede hacer referencia a la existencia de un paradigma diferenciado de los estilos de vida femeninos que tienden a ser condicionados por la figuración del marco social y antropológico al que pertenecen distintos grupos de personas, mismas que se encuentran clasificadas en relación a la posición social y económica que ocupan dentro de distintas sociedades regionales dado la integridad cultural de la civilización moderna que en diferentes partes del mundo, se manifiesta acorde a la calidad nacional de su influencia, cuestión que supone dar cuenta de las diferencias existentes entre distintas expresiones culturales, tales como pueden ser: las “chinerías”, el “alemanismo”, el “afrancesamiento” y el “norteamericanismo”. Del mismo modo, dar cuenta de la integridad del regionalismo de los distintos estados de la república mexicana, así como también de la identidad cultural de los distintos pueblos indígenas que habitan dentro de cada uno de dichos estados, es una cuestión que supone ser dinámica en relación a la personalidad del “chiquillo de Sonora”, misma que tiende a ser empática al estilo de las influencias de paradigmas televisivos del recuerdo como “Smallville”, “Los Power Rangers”, o la nota periodística del “Subcomandante Marcos”. El mismo caso en ese ese sentido, daría cabida al correcto reconocimiento de la vida social de personas con distintos orígenes étnicos y regionales, dando lugar al recuerdo por ejemplo, de la decires populares como el de las muchachas “Bartolas” por su imagen campesina con un origen del más humilde en todo México e incluso en gran parte de América Latina, exceptuando tan sólo a aquella clase de muchachas “negritas” que son más originarias de los países caribeños. La formulación compuesta entonces, del trabajo social tocante a la definición de la calidad de vida de los habitantes de los hogares y los miembros de las familias de distintos sectores de la sociedad mexicana incluyente de la clase más acomodada del país, la clase media nacional y las clases populares de México, tendría que ser visionaria en relación a la dimensión popular que juegan distintos grupos de personas clasificados según sus características fenotípicas más comunes en un sentido netamente antropológico, social e incluso económico, cuando hay que reconocer cuál es la calidad del roce social común al grupo étnico al que pertenecen. Un ejemplo de caso en ese sentido, es el de los grupos humanos semejantes por su talla física a los “pigmeos” que tienen que hacerle la “gracia” en distintas localidades urbanas de México, a las ambientaciones musicales con géneros afines y similares al “Dance”, entre grupos sociales donde los intereses comunes a las tradicionales familias históricas de “mulatos” que en la época contemporánea se identifican con las ambientaciones musicales del género “Disco”, tienen a bien coordinarse con un estilo “cutie” de la moda que es conocedora de bandas de rock como “Blind Melon”, sin secundar necesariamente, la cultura “rapper” más valedora de las crónicas psicóticas de personajes ficcionales como “Guasón” y sí aclimatándose de forma más convencional a la esencia del estilo de las estrellas populares de la televisión mexicana, dando lugar a que la convencional clasificación que se hace de su correcto estilo en relación al culto al oro, la plata y el bronce, suceda con beneplácito de la integridad cultural de cuadros de población que necesariamente tienen que favorecer el desarrollo social de las familiar nucleares del país, pese a lo transcultural que pueda estar su situación en términos de las culturas populares de “México” en relación a las de países como “Colombia” a través de la simpatía por las ambientaciones musicales con grupos tropicales del recuerdo como la “Sonora Dinamita”. 

Siendo del modo antes planteado en el caso por ejemplo, de tener por una seria cuestión que responder a la pregunta de: ¿Por qué es necesario tener que figurar como un "payaso" a la moda de grupos del recuerdo como "ABBA" y no tan sólo a la moda de un rapero que busca en la cultura del arraigo al apoyo institucional de la protección civil, la previsión social y el desarrollo social, la predecible operatividad de dicha clase de organizaciones sociales?, supone que lo más valedor de dicha clase de paradigmas del estilo de la moda de época en relación a la moda contemporánea, podría ser tener que dar por consecuente a una dimensión del arte compuesta por distintas influencias integradoras de las tendencias del consumo de distintas clases de productos y servicios, tales como pueden ser por ejemplo los pistaches, dado la convencional sociología de una dimensión de la cultura popular escolar de masas que es propia de la naturaleza de la colectivización de información extraoficial que aficionados a los estudios de biólogos y médicos veterinarios zootecnistas, que son afines a centros de estudios superiores como los de la “Universidad de Sonora”, realizan de forma regular por mero reflejo conservador ante la dinámica social que es propia de la correcta figuración que existe del diario acontecer intelectual y periodístico a nivel nacional y regional en México.

Siendo del modo antes descrito, el caso de tener que corresponder a las correctas impresiones que se tienen sobre la naturaleza ficcional de personalidades como la del personaje “Bulma” de la serie animada japonesa “Dragon Ball”, se comprende como parte de un dominio popular de masas comprometido con el testimonio de la fortaleza de los artemarcialistas que se enfrentan dentro de esa serie, donde el espíritu cultural y artístico afín a los géneros musicales del “rap”, el “synthwave” y el “post disco”, entre particulares comprometidos con las identidades aprehensivas a los juguetes y al fenómeno histórico de la radio FM, diferencia entre las personalidades faranduleras y las comunes del pueblo masivo. El mismo caso a la par, puede ser consecuente con la sana impresión que se tiene de la naturaleza social del consumo de distintas clase de productos comestibles, tales como pueden ser los “pistaches”, dentro de un cosmos de posibilidades de desarrollo comercial común a la cultura de las clínicas médicas especializadas en tanatología, terapia “Gestalt” y geriatría.